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Enlace para visualizar la Jornada de Discapacidad y Accesibilidad Ambiental e Informe de Repercusión

El pasado día 17 de diciembre se celebró la primera Jornada de Discapacidad y Accesibilidad Ambiental. Este evento es de gran relevancia ya que nunca se había hablado de barreras ambientales. Las personas que padecen enfermedades ambientales, como son la sensibilidad química múltiple y la electrosensibilidad, tienen serias dificultades para acceder a espacios públicos y privados a causa de barreras invisibles, como los tóxicos ambientales o las ondas electromagnéticas, barreras que otras personas no perciben, que no les hacen daño.
Por eso, desde CONFESQ abogamos porque el concepto de Accesibilidad Universal tenga en cuenta también a estos pacientes, que la OMS reconoce en su epígrafe T 78.4: “Intolerancia Ambiental Idiopática”.  El aislamiento que se deriva de padecer esta patología es brutal, a veces separando al afectado de su familia, impidiéndole acudir al trabajo y mantener contactos sociales. 
El logo que acompaña el cartel de esta conferencia es el de discapacidad orgánica (aquella producida por la pérdida de funcionalidad de algunos sistemas corporales, que suelen relacionarse con los órganos internos o procesos fisiológicos, ya sean de forma congénita o adquirida) pero en esta ocasión la hemos coloreado de verde para simbolizar la discapacidad orgánica por causas ambientales.
La jornada, que presentó Dña. María López Matallana, vicepresidenta de CONFESQ, fue abierta por Dña. Rosa Nieto, presidenta de la asociación de pacientes Electro y Químico Sensibles por el Derecho a la Salud, que remarcó las importantes e invisibles barreras ambientales con las que se encuentran niños y adultos afectados por estas enfermedades y las terribles repercusiones en su vida cotidiana.
“Un caso especialmente dramático y, lamentablemente, cada vez más habitual, es el de los niños y jóvenes afectados de SQM y EHS que no pueden asistir a centros educativos, a actividades extraescolares, a cumpleaños de otros niños, quedando a tan tempranas edades en riesgo de exclusión social. Los jóvenes que consiguen terminar sus estudios, ¿cómo van a acceder al mercado laboral? ¿Encontrarán un empresario dispuesto a adaptar el puesto de trabajo para contratarlos a ellos?”
Tuvimos el placer de contar con el Dr. Olle Johansson, (Suecia), que es uno de los mejores investigadores sobre los efectos en la salud de los campos electromagnéticos, profesor asociado recién jubilado de la Unidad de Dermatología Experimental, del Departamento de Neurociencias, Instituto Karolinska en Estocolmo. La electrosensibilidad es considerada una discapacidad en Suecia siendo el Dr. Johansson uno de los que ha formado parte de todo el proceso de reconocimiento y aplicación. En Suecia es posible hacer adaptaciones tanto en el hogar como en el trabajo u otros entornos sociales, con el fin de prevenir los síntomas que provoca padecer electrosensibilidad. Le realizó la entrevista una invitada de excepción, la Dra Pilar Muñoz-Calero, presidenta de la Fundación Alborada, experta en medicina ambiental.
Dña. Inmaculada Sanz, habló de la situación de accesibilidad para las personas con Sensibilidad Química Múltiple en España, haciendo referencia a las normas actuales y la forma de abordar el tema en el contexto de la accesibilidad de edificios. Inmaculada es arquitecta técnica especializada en gestión patrimonial y facilities management, dirige el departamento de mantenimiento de Patrimonio de Fundación Pelayo, y está afectada por esta enfermedad, formando parte del equipo directivo de la asociación de pacientes SFC-SQM Madrid.
También nos acompañó D. Gregorio Saravia Méndez, delegado del CERMI para los Derechos Humanos y la Convención de la ONU, que nos situó en el marco legal de la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad, firmada por España en 2008.
Daniel-Anibal García, Secretario de Finanzas de COCEMFE Nacional, referenció el tema que nos ocupa en el marco del Plan Nacional de Prevención de la Discapacidad,  en el que está participando.
A raíz de esta jornada, CONFESQ publicó una nota de prensa el día 22 de diciembre en la que se aborda el problema de las barreras ambientales a la accesibilidad universal. Según el informe de repercusión, tuvo un total de 25.598 envíos y 91.990 impactos llegando aproximadamente a casi 200.000 personas.
Si no pudiste visualizarlo aquel día, aquí te dejamos el enlace a la Jornada “Discapacidad y Accesibilidad Ambiental”:

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