GUÍAS INSS
Desde su publicación, tanto pacientes, como médicos especialistas, e incluso sociedades médicas, mostraron su rechazo unánime al contenido de esta Guía, muchas de cuyas afirmaciones y argumentos no están actualizados, contradicen publicadas del Ministerio de Sanidad e incluso llegan a realizar recomendaciones terapéuticas que, según muestran los últimos estudios e investigaciones, pueden resultar perjudiciales para la salud de los pacientes.
Esta situación dejó al colectivo de enfermos estupefactos, no solo por estar obsoleta en sus fuentes y planteamientos, fruto de la falta actualización en el conocimiento científico y el seguimiento continuado de las publicaciones en la materia, que afortunadamente han logrado avances significativos en el conocimiento de estas patologías crónicas en las últimas décadas, especialmente por el retroceso en el reconocimiento de la etiología de estas enfermedades, que se ve reflejado en toda la GUIA, como enfermedades multisistémicas con causas orgánicas, tal y como muestran numerosos estudios, rescatando nuevamente las teoría psicopatogénicas, que unidas a la mayor prevalencia que se da entre mujeres, han conducido a un gran SESGO DE GÉNERO, que afecta de manera transversal a todas las patologías tratadas, y que se ve claramente por ejemplo en algunos de los cuestionarios de evaluación, cuando toman como referente para medir la pérdida de la capacidad funcional la posibilidad o no de realizar ciertas tareas domésticas tales como fregar a mano los platos, planchar, cocinar,… Debido a este enorme retroceso, de entre 20-30 años en la lucha por el reconocimiento de estas enfermedades, las entidades de pacientes (asociaciones, federaciones, agrupaciones, confederaciones,…) comenzaron a movilizarnos y a llevar a cabo las siguientes acciones: